martes, 22 de marzo de 2011

lunes, 14 de marzo de 2011

Otro derrame más de Pluspetrol

y luego ¿donde será?

Claudia Palomino

El 16 de enero en el río Chambira, se produjo otro derrame de petróleo crudo de la empresa Pluspetrol y para no perder la costumbre, la empresa envió a especialistas que arrojaron químicos para que el petróleo se hunda. Las comunidades afectadas han sido las de San Juan del Chambira, Ollanta y Progreso del distrito de Parinari en la provincia de Loreto, que esperan una reunión con la petrolera para poder negociar. Sabemos que las autoridades respaldaran a la empresa y ¿quién respaldará a las comunidades?

Hasta el momento Pluspetrol tiene 81 derrames en su historial y este ha sido el primero del 2011, como señalando que este año no variará en su actuar de ganar cifras millonarias a costa de atentar contra nuestro medio ambiente y todas las poblaciones que allí habitan. Como en otras ocasiones, la empresa dice que el derrame se debe a cortes del oleoducto Nor – Peruano por parte de terceros, ¿un sabotaje?, ¿no será que el oleoducto está en condiciones muy deplorables? Aún si imaginamos que sus argumentos son reales,¿por qué siempre hay pautas comunes en los derrames de Pluspetrol?:

· No alerta a la población apenas ocurrida la emergencia para que tomen las precauciones del caso, se enteran cuando las manchas ya están en el río o por las radios locales, pero ningún comunicado oficial: ni del Estado, ni de Pluspetrol.

· La empresa en lugar de limpiar el río con las técnicas adecuadas, lo que hace es usar químicos para fondear o tapar el derrame y que no se sepa la cantidad exacta del derrame. ¿Acaso no hay planes de contingencia?

· Las autoridades no se hacen presentes inmediatamente para atender la emergencia y cuando lo hacen es para justificar a la empresa.

· La mayoría de medios de prensa, sobre todo los de Lima, no reportan lo sucedido. Un ejemplo: se denunció el derrame del 19 de Junio 2010 de Pluspetrol porque fue demasiado grande aunque intentaron minimizarlo, pero en ese mismo año no se habló del derrame del mes de mayo, el del 24 de setiembre, del 19 de diciembre y el de 16 de enero 2011, ocurridos por la misma empresa.

· Generalmente las poblaciones afectadas son comunidades nativas ubicadas en zonas alejadas, de las que existe un desconocimiento general sobre su forma de vida y cosmovisión. De manera que es difícil que puedan defenderse y que se entienda el real daño que les han ocasionado, pues estos ríos no son solo sus fuentes de consumo, sino son su principal fuente de alimento y vida, su ser sagrado.

· Luego de varios días, la empresa y las autoridades del Estado señalan que las aguas del río han recuperado su normalidad, sin embargo, otros estudios dicen que el agua sigue contaminada y la población sigue señalando que no puede consumir el agua del río, ni los peces y al estar en contacto con ella presenta afecciones gastrointestinales y a la piel.

Hasta cuándo seguiremos con esta empresa que remedian el daño ocasionado con un poco de comida, agua y dinero, amparados en un gobierno que piensa que estas poblaciones son ciudadanos de segunda categoría. Y si alguien se opone a esta empresa ven la manera de callarlo, como hicieron con el religioso ecologista inglés Paul Mc Auley, a quien quisieron sacarlo del país acusándolo de soliviantar a la población y hacer política, cuando con su organización había denunciado la contaminación ocasionada por esta empresa. ¿Qué pasaría si en un vecindario de clase alta de Lima, del caño les empezara a salir agua con petróleo?, ¿las respuestas sería iguales, como con estas poblaciones que también son peruanas?